Los empresarios del sector coinciden en que surge descongestionar el puerto del Callao. Solo así se conseguirá más dinamismo en las operaciones.
Nota de Redacción.
Francisco Gonzáles y Favio León, director y gerente general de la Asociación Peruana de Operadores Portuarios (Asppor), respectivamente, dan cuenta también de las perdidas que se presentan en el marco de la logística del comercio exterior, pero enfocan mas bien el accionar de la delincuencia. “Ellos saben qué carga es la de más alto valor, saben discriminar. Debe haber allí una red”, razona León. Lejos de quedarse en el lamento, ASPPOR viene trabajando con la Autoridad Portuaria Nacional, en el diseño y la puesta en marcha de un corredor seguro para cuya implementación reclaman la participación y el compromiso de todos los almacenes, las empresas y la Policía Nacional.
El Perú tiene alrededor de cuatro mil productos para exportar. Así lo asegura Carlos Posada Ugaz, director ejecutivo del Instituto de Investigación y Desarrollo de Comercio Exterior, quien afirma que es vital ampliar mercados hacia el exterior, pues la plaza interna, donde el poder adquisitivo lo tienen entre doce y quince millones de personas, resulta reducida, frente a los siete mil millones de potenciales compradores que ofrece el mercado exterior.
¿Qué se necesita? Sin duda, mejorar la competitividad, bajando los costos que actualmente genera la logística interna. “El 90% de lo que sale por vía marítima del Perú, sale por el Callao. ¡El nuestro es un país de 31 millones de personas, que tiene un puerto!, se queja. “Tenemos casi tres mil kilómetros de costa –continua- pero carecemos de lo que tienen la mayoría de países que quieren generar competitividad: el cabotaje libre”, señala.
Más pendientes
Para Cristian Calderón, director del Consejo de Usuarios del Sistema de Distribución Física Internacional (Conudfi), la red vial funciona tan mal en nuestro país, que puede ser calificada de ‘perversao, pues mo solo resta competitividad a las empresas, sino que también afecta a los ciudadanos. Para graficar la idea, alude al mototaxi que comparte ruta con un container, y al vecino que se ve mortificado, m ientras riega su jardín, por la presencia de un camión que llega a sacar mercadería del almacén de una fábrica instalada en el mismo barrio. Señala la urgente necesidad que tiene el Perú de poner en marcha un replanteamiento de suelos, como según dice, se hizo en Valparaíso y en Barcelona. También menciona la conveniencia de contar con rutas alternas, exclusivas para el transporte de carga, que no pasen por la ciudad, y que cuenten con plataformas logísticas y zonas de respaldo.
Francisco Gonzáles y Favio León, director y gerente general de la Asociación Peruana de Operadores Portuarios (Asppor), respectivamente, dan cuenta también de las perdidas que se presentan en el marco de la logística del comercio exterior, pero enfocan mas bien el accionar de la delincuencia. “Ellos saben qué carga es la de más alto valor, saben discriminar. Debe haber allí una red”, razona León. Lejos de quedarse en el lamento, ASPPOR viene trabajando con la Autoridad Portuaria Nacional, en el diseño y la puesta en marcha de un corredor seguro para cuya implementación reclaman la participación y el compromiso de todos los almacenes, las empresas y la Policía Nacional.
Urge Autoregulación
Alberto Lei es el gerente general de APACIT, agrupación que congrega a agentes de la carga internacional.
Para él, los problemas de acceso al Callao son también, muchas veces, el origen de costos que sorpresivamente son cargados al importador y cuyo origen éste no termina de entender.
Es necesario consensuar entre todos los privados, optar por la autoregulación y unificar conceptos de costos, pues la regulación estatal puede ser peor y generar que las navieras extranjeras decidan llevar la carga a Guayaquil, advierte. (FUENTE: PANORAMA LOCAL – EL COMERCIO).